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DATOS DE LA RUTA

DENOMINACIÓN: Punta de Gáldar-Sardina del Norte

TIPO: Lineal

DIFICULTAD: Fácil

DISTANCIA: 7,9 km. (Distancia aproximada medida con aplicación de móvil).

PUNTO MÁS ALTO: 148 metros.

PUNTO MÁS BAJO: 47 metros.

PUNTO DE PARTIDA: Punta de Gáldar.

HORA DE INICIO: 8:55 horas.

PUNTO DE LLEGADA: Playa de Sardina.

HORA DE LLEGADA: 13:51 horas.

DURACIÓN: 4 horas 56 minutos. (Se cuenta el tiempo en movimiento, paradas puntuales para disfrutar de la naturaleza, descanso para el avituallamiento, paradas técnicas para consultar el recorrido, toma de fotos,…)

FECHA DE REALIZACIÓN: 01/10/20

FUENTE: Para realizar este sendero nos hemos basado en uno más largo que el usuario de Wikiloc, “senderosnorberto”, ha publicado y que va desde Roque Prieto a Puerto de Sardina del Norte. La idea nuestra es hacerla en varias etapas.

Tercera ruta por la costa Noroeste de Gran Canaria. Hoy partimos desde la Punta de Gáldar y la llegada será en Sardina del Norte. Seguimos en la línea de los senderos anteriores, es decir, cómodos de hacer, ninguna dificultad que salvar durante el camino y variedad de tipos de firme. Algo de asfalto, pistas de tierra, paseos costeros y senderos.

Para llegar al lugar del inicio de la ruta de hoy, tomamos la salida 25 de la GC-2 “Gáldar / Sardina” y en la siguiente rotonda, tomamos la segunda salida indicada como “GC-202 Barrial / Sardina”. Seguimos por la GC-202 durante 4,3 kms hasta llegar a un cruce que está indicado como “Parque Científico Tecnológico Comarcal / Punta de Gáldar”. Aparte de la señalización habitual, en una pared anexa a la señal mencionada, hay otra que indica “Bajada de Caleta”. Giramos a la derecha en dicho cruce y recorremos 2 kms por la carretera que, pasando por Caleta de Abajo, nos conducirá hacia La Punta de Gáldar donde dejaremos el vehículo. Nosotros lo aparcamos en la misma carretera pues hay plazas de aparcamiento en el borde izquierdo según el sentido de nuestra marcha.

Empezamos la ruta justo donde dejamos el coche, en las inmediaciones de un paso de peatones y nos dirigimos hacia una araucaria que tenemos delante de nosotros según el sentido de circulación que teníamos conduciendo. Son apenas 50 metros para llegar al parterre donde está la araucaria y ahí giramos a nuestra derecha para caminar por la calle “La Campana”

Al final de esta corta calle giramos a la izquierda para ver una de las piscinas naturales de este lugar. Seguimos avanzando por un sendero de tierra con la costa a nuestra derecha y, por la izquierda, observamos un solar enorme donde a través de su roto muro podemos observar un inmenso parque de placas solares. Llegamos hasta un mojón de la Demarcación de Costas desde donde podemos divisar a lo lejos, el faro de Sardina y más cercano a nosotros, a nuestra izquierda, el Caletón de Los Cangrejos.

Desandamos sobre nuestro pasos para volver en dirección hacia la calle La Campana. Justo antes de llegar a dicha calle, giramos a la derecha donde tenemos que salvar un pequeño desnivel para introducirnos en un callejón con firme de tierra que nos da acceso a la carretera asfaltada.

Avanzamos por ella y observamos a nuestra izquierda una plaza pública que en los primeros metros está por encima del nivel de la carretera, pero más adelante, el acceso es al mismo nivel. Seguimos avanzando por el asfalto ignorando un cruce que vemos a nuestra izquierda. Después de dicho cruce, seguimos en la carretera hacia la derecha.

La carretera ahora tiene palmeras a ambos lados y pronto pasamos delante de las instalaciones del “Parque Científico Tecnológico Comarcal La Punta de Gáldar”, que quedan a nuestra derecha.

Una vez que llegamos a la esquina de la muralla que delimita la instalación del Parque Tecnológico, tenemos la opción de seguir por la carretera o atajar campo a través por nuestra derecha para llegar más adelante a una curva a la izquierda de dicha carretera evitando unos metros de asfalto.

Pasamos la cadena y atajamos hacia la construcción que se ve a la izquierda de la foto.

Avanzamos unos metros por la carretera hasta la siguiente curva de 90° también a la izquierda. En esta curva dejaremos momentáneamente el asfalto para acercarnos al litoral dejando una instalación de motocross (Circuito de Motocross Gáldar Park) a nuestra izquierda. Terminada la valla de la pista deportiva, dejamos una edificación circular, a nuestra derecha y llegamos hasta una cruz de color rojo cerca de una curiosa edificación rectangular con paredes de piedra.

Después de disfrutar de las vistas de la costa que podemos ver desde este punto, volvemos sobre nuestros pasos hasta llegar a la carretera asfaltada, al mismo sitio donde la abandonamos con anterioridad. Seguimos caminando por el asfalto entre el circuito de motocross por la derecha e invernaderos por la izquierda.

Después de una curva de 90° a la derecha llegamos a otra igual, pero a la izquierda. Nos encontramos con la puerta principal del circuito a nuestra derecha y salimos del asfalto de frente en dirección a la costa. A la izquierda vemos una pared de bloques con un rótulo de “Caballerizas” y curioseando desde la verja vemos varios caballos en su interior. Superada la caballeriza, disfrutamos de nuevas panorámicas del litoral, sacamos las correspondientes fotos y volvemos sobre nuestros pasos hasta la carretera y al llegar a ella giramos a la derecha.

Caminamos solo unos metros por la carretera y la abandonamos por la derecha por una pista de tierra.

Llegamos por esta pista, entre invernaderos, nuevamente al litoral donde giramos a la izquierda para ir caminando bordeando la costa con fincas de plataneras a nuestra izquierda. El camino está bien marcado y por él llegamos a la localidad de Peñón Alto tras una ligera subida y luego una bajada algo pronunciada y larga.

Pasamos entre las primeras casas de Peñón Alto y llegamos a un cruce de caminos donde el de la derecha es el acceso a una vivienda particular y que tiene un curioso anemómetro realizado con materiales de desecho: rueda de bicicleta y garrafas de agua. Obviamente tomamos el camino que va hacia la izquierda. Pasado este acceso atravesamos un pequeño barranquillo por un sendero bien marcado.

Subimos por la otra vertiente del barranquillo y seguimos avanzado por un estrecho sendero que no ofrece duda. Enseguida vemos al frente las primeras viviendas de una nueva localidad, Barranquillo del Vino.

Al llegar a una vivienda de color celeste a la izquierda del sendero, lo abandonamos ascendiendo en paralelo a la pared de la casa y accedemos a una pista de tierra donde giramos a la derecha.

Seguimos por la citada pista. En el próximo cruce tomamos hacia la derecha al pasar por delante de una vivienda nº 47.

El firme pasa a ser ahora de asfalto. Pronto llegamos a unas curiosas casas con las fachadas decoradas con azulejos con motivos como la isla de Gran Canaria, barcos, anclas, peces, timón,…

Cruzamos un pequeño barranco sin apenas dificultad con el fin de evitar un tramo de asfalto y llegamos al núcleo principal de Barranquillo del Vino. Al llegar a las primeras casas nos acercamos al litoral para observar nuevas vista de este desconocido entorno.

Seguimos avanzando por la calle principal con las casas a nuestra derecha y llegamos a una sencilla pero bonita plaza/mirador que en una de sus esquinas más cercanas al mar tiene una hornacina con la imagen de “Nuestra Señora del Faro”. Es un bonito enclave donde volvemos a observar el variado litoral del noroeste grancanario, tomar unas bonitas fotos y realizar un descanso para reponer fuerzas.

Salimos de la plaza hacia la derecha para seguidamente girar a a izquierda y continuar de frente. Pronto descendemos a una piscina natural preparada como zona de baño que atravesamos sin problemas por caminos escalonados. Al final, el camino vuelve a ascender para pasar por un estrecho callejón entre dos viviendas que nos lleva a la carretera nuevamente, donde giramos a la derecha.

Caminamos por delante de un pequeño grupo de casas y al terminar giramos a la derecha para acceder a un nuevo mirador situado en la punta de un saliente costero desde donde obtenemos, una vez más, preciosas vistas del litoral. El mirador, reformado en agosto de 2018, está dedicado a la memoria de Juan Manzana.

Seguimos avanzando en la ruta de hoy y nuestro próximo objetivo es el Faro de Sardina del Norte. Vamos caminamos por una ancha pista que va pasando por pequeños grupos de viviendas o casas aisladas. Destaca en el camino un banco solitario situado cara al mar donde no pudimos resistir la tentación de hacernos algunas fotos.

Seguimos por la pista que se va adaptando al terreno haciendo algunas eses, a veces más cerca de la costa y otras menos. Ciento setenta metros más adelante de donde está situado el banco, dejamos la pista para bajar por un nuevo barranquillo en dirección a la costa. Después de la última casa, en el barranquillo, nos asomamos a la costa para ver otra piscina natural. Continuamos avanzando y pasamos por delante de otro pequeño grupo de casas y después de la última vivienda, cruzamos otro pequeño barranquillo por un sendero bien marcado que nos lleva directos a la planicie donde está enclavado el Faro de Sardina del Norte.

Una vez disfrutado del entorno del faro y captarlo con nuestra cámara, emprendemos el último tramo de la caminata de hoy. Empezamos cruzando una pequeña barranquera y posteriormente saltar un antiguo muro enfrente del faro por su parte más lejana al mar. Para cruzar el muro basta con localizar las partes de menos altura para pasarlo sin ningún esfuerzo.

Una vez superado el muro, un sencillo sendero nos lleva hacia una cercana urbanización (Playa Canaria) construida en el borde de la costa un poco por encima del nivel del mar.

La urbanización tiene un bonito camino costero que pasa por delante de todas las viviendas lo que nos conduce a disfrutar de nuevo de la brisa marina y su espectacular paisaje. Cuando acaba el camino giramos a la derecha y prácticamente campo a través caminamos unos metros en dirección a una cercana calle asfaltada.

Subiendo por la calle, al llegar al segundo cruce nos desviaremos a nuestra derecha para ascender una loma desde donde veremos unas preciosas vistas del litoral. A la izquierda y ya bastante cerca, vemos la Playa de Sardina y un poco más en la lejanía podemos deleitarnos con la preciosa vista del impresionante Farallón de Tábata.

Iniciamos el descenso nuevamente hacia la carretera y giramos a la derecha al llegar a ella. Seguimos avanzando unos 850 metros para llegar a una rotonda donde confluye nuestra calle y la GC-202. Después de pasar la rotonda y una larga curva hacia la izquierda giramos a la derecha hacia la calle Isla de Tenerife.

Descendemos por ella y cuando la calle gira hacia la izquierda, nos salimos de ella por nuestra derecha para bajar unas escaleras que nos conducen a la avenida Alcalde Antonio Rosas desde donde vemos la playa de Sardina del Norte y donde ponemos punto final al recorrido de la tercera ruta de la costa noroeste de Gran Canaria.

GALERÍA FOTOGRÁFICA